El confinamiento por la COVID-19 no evitó conductas sexuales de riesgo
Según un estudio de la UdL y el IRBLleida sobre uretritis atendidas en Urgencias
Los casos de uretritis, relacionados a menudo con infecciones de transmisión sexual (ITS) como la clamídia o la gonorrea, se mantuvieron en la región sanitaria de Lleida durante el confinamiento por la pandemia de COVID-19. Así lo revela una investigación de investigadoras e investigadores de la Universitat de Lleida (UdL) y el Instituto de Investigación Biomédica de Lleida (IRBLleida), publicada en la revista Cureus, basada en datos de los servicios de Urgencias del Hospital Universitario Arnau de Vilanova (HUAV) y el CUAP Prat de la Riba. Los resultados sugieren que las restricciones no hicieron disminuir las conductas sexuales de riesgo.
"No se ha observado una reducción significativa del número de casos de uretritis entre el 2019 y el 2020, probablemente porque las personas continuaban con relaciones sexuales inseguras a pesar de las restricciones sociales y las dificultades que plantea el confinamiento", explica el profesor de la Facultad de Medicina de la UdL, investigador del IRBLleida y facultativo del HUAV, Oriol Yuguero. "Este es el primer estudio de estas características realizado en el Estado español", añade.
La investigación incluye todos los pacientes mayores de 16 años que acudieron a los dos principales servicios de urgencias de la región sanitaria - con una población de referencia de 300.000 habitantes- entre marzo y junio de 2019 y en el mismo periodo de 2020. Detectaron 79 personas con uretritis, el 94,9% de las cuales eran hombres. Los principales síntomas eran la secreción uretral (59,5%) y la disúria (26,6%), es decir, dificultad o dolor al orinar.
A pesar de que el 63,2% de los pacientes informaron de relaciones sexuales de riesgo el 2019 y este porcentaje disminuyó hasta el 43,9% el 2020, "esta diferencia no es estadísticamente significativa", según los autores del artículo, porque "no se observó ninguna variación ni en el número de pacientes ni en su género o edad". Fueron 37 a la muestra de 2019 y 38, a la del año siguiente. Además, "las uretritis causadas por clamídia aumentaron de forma significativa al 2020", añade Yuguero.
"Durante el confinamiento estricto en nuestra región sanitaria no observamos una reducción significativa de los casos de uretritis. La gente continuó manteniendo relaciones sexuales inseguras a pesar de las restricciones", afirman a las conclusiones. "Si a pesar de las restricciones de movilidad y el miedo a la transmisión sobre todo en los primeros meses de la COVID, se mantuvieron los casos y las relaciones de riesgo, tendríamos que buscar nuevas estrategias de control y contención de las enfermedades de transmisión sexual", apuntan.
Texto: Prensa UdL
El investigador, Oriol Yuguero